La petición sobre el juego se extiende por toda Europa

Autor: Connor Jan 21,2025

Stop Destroying Video Games Petition Gains MomentumUna petición de la Unión Europea que exige a los editores que mantengan la jugabilidad de los juegos en línea después del cierre de servidores está ganando terreno. Con más del 39 % de su objetivo de un millón de firmas ya alcanzado, la iniciativa está más cerca que nunca del éxito.

Los jugadores de la UE se unen

Casi 400.000 firmas aseguradas

Stop Destroying Video Games Petition Making ProgressLa petición "Detengamos la destrucción de los videojuegos" ha superado el umbral de firmas en siete países de la UE: Dinamarca, Finlandia, Alemania, Irlanda, Países Bajos, Polonia y Suecia. El impresionante total asciende actualmente a 397.943 firmas, un significativo 39 % del millón requerido.

Esta petición, lanzada en junio, aborda la creciente preocupación de que los juegos no se puedan reproducir una vez finalizado el soporte oficial. Aboga por una legislación que exija a los editores garantizar la funcionalidad continua, incluso después del cierre de servidores, evitando la desactivación remota de juegos sin ofrecer alternativas razonables para seguir jugando.

Como dice la petición, los editores deberían estar obligados a "dejar dichos videojuegos en un estado funcional (jugable)", evitando la práctica de desactivar juegos de forma remota sin ofrecer soluciones viables para el acceso continuo.

Petition Highlights Industry PracticesLa petición cita el controvertido cierre de The Crew de Ubisoft en marzo de 2024 como un excelente ejemplo. A pesar de una importante base de jugadores (estimada en 12 millones en todo el mundo), problemas con el servidor y con las licencias llevaron a Ubisoft a cerrar el juego, borrando el progreso de los jugadores y provocando indignación, incluyendo acciones legales en California.

Si bien la petición aún necesita un número sustancial de firmas para alcanzar su objetivo, los ciudadanos de la UE en edad de votar tienen hasta el 31 de julio de 2025 para sumar su apoyo. Aunque los ciudadanos de fuera de la UE no pueden firmar, pueden ayudar a crear conciencia y fomentar la participación.