El recuento de jugadores de Deadlock se ha desplomado, lo que llevó a Valve a renovar su estrategia de desarrollo. El máximo de los jugadores concurrentes del juego ahora ronda los 18,000-20,000, una caída significativa desde su máximo anterior de más de 170,000.
En respuesta a esta disminución, Valve ajustará su horario de actualización. En lugar del ciclo de liberación quincenal anterior, los parches de punto muerto ahora se lanzarán en una línea de tiempo flexible. Este cambio, según los desarrolladores, permite pruebas e implementación más exhaustivas de actualizaciones, lo que resulta en lanzamientos más sustanciales y pulidos. Las hotías regulares aún se implementarán según sea necesario.
Imagen: Discord.gg
Los desarrolladores reconocieron que el ciclo de actualización de dos semanas anterior, aunque beneficioso, no permitió suficiente tiempo para pruebas adecuadas e integración de cambios. Este cambio en la estrategia tiene como objetivo abordar este problema.
A pesar de la reducción de la base de jugadores, Valve asegura a los jugadores que Deadlock no está en peligro. El juego permanece en acceso temprano, sin una fecha de lanzamiento actualmente establecida. Los desarrolladores enfatizan su compromiso con la calidad sobre la velocidad, priorizando un producto final pulido. El ritmo de desarrollo más lento también puede estar influenciado por la priorización interna de otros proyectos, como el rumoreado nuevo juego de vida media. El enfoque de Valve refleja la evolución del ciclo de desarrollo de Dota 2, lo que sugiere un compromiso a largo plazo con el éxito de Deadlock.